#1 Cruzando la carretera SXM

Rédigé le 16/07/2023
El Autoestopista


¿Yo? ¿Hacer autostop? ¡Estás loco! ¡Sí, pero en San Martín no es lo mismo!
¡¿Quién no ha tenido esa conversación?! Conducir en SXM no es tan fácil... y no para todo el mundo. En cambio, hacer autostop es algo que todos hemos probado al menos una vez. Todos estaremos de acuerdo en que "¡es fácil!



Por regla general, bastan unos minutos para que un automovilista se pare a tu lado y te pregunte adónde vas. Incluso me atrevería a decir que es muy probable que te ofrezcan llevarte antes de que sepas adónde vas. O que el conductor se desvíe para llevarte a tu destino.
Por no hablar del hecho de que es relativamente seguro... bueno, ¡claro que el riesgo cero no existe! Pero, aun así, en San Martín uno se siente libre de hacer autostop. 

Eso está muy bien, hablo de una especie de "país de los ositos" del autostop. Pero cuando llegas a la isla y no estás acostumbrado, no es fácil dar el paso.
Así que escucha a la gente que te rodea, ¡y hay algunas reglas que respetar, por así decirlo! 
En primer lugar, ponte tu equipo de autoestopista. Es decir, unos pantalones vaqueros cómodos, una camiseta sencilla y unas zapatillas deportivas. ¡Porque hacer autostop en chanclas o chanclas es una mala idea! En primer lugar, el tiempo cambia en un abrir y cerrar de ojos por aquí, y en segundo lugar, caminar por las carreteras de San Martín no es un picnic... así que es mejor llevar unas zapatillas cómodas cuando emprendas tu aventura.
En segundo lugar, tenga en cuenta la "temporada" y las "horas" en las que va a dar lo mejor de sí. Obviamente, durante las vacaciones escolares, las mañanas son inmediatamente más complicadas. Lo mismo ocurre con los domingos y festivos, cuando las carreteras estarán desiertas. La temporada baja significa que en mayo hay menos automovilistas en las carreteras.La temporada baja significa que hay menos conductores, pero aún así podrás encontrar quien te lleve.
Al fin y al cabo, es como compartir coche sin coste alguno.



¡Vamos a por ello! Estamos listos, nos preparamos y nos lanzamos.
Nos plantamos al borde de la carretera, con el pulgar levantado y una sonrisa digna de un anuncio de Colgate, y esperamos impacientes nuestra primera parada.
- Hola, ¿a dónde va? (¡Sí, porque aquí no nos molestamos en formalidades!)
- ¡Hola! Voy al Hope Estate.
- Sube, voy al B.O. Te dejaré por el camino.
Estupendo, ¡entremos! Siguió una conversación desenfadada. Cada uno nos cuenta quién es, a qué se dedica, por qué ha venido a San Martín y cuánto tiempo lleva aquí. Y en un abrir y cerrar de ojos, estamos a salvo en el puerto.
Fue un juego de niños. Al final, no estuvo tan mal.

Lo más sorprendente de la Parada SXM es la cantidad de encuentros que puedes tener. 
Durante el trayecto, charlas con el dueño de un negocio, un peluquero, un pescador, un banquero o un trabajador temporero de un restaurante. Gente nacida en la isla, temporeros que llegaron para 6 meses pero se han quedado 3 años, 10 años, 20 años... Hay algo en esta isla que atrae a la gente y hace que se quede. 
Cuando uno hace autostop con regularidad, se da cuenta de la diversidad de San Martín. Incluso acabas haciendo amigos autoestopistas, los que te encuentras regularmente, que te reconocen al borde de la carretera y ponen el intermitente en cuanto te ven a lo lejos.



A pesar de la aparente facilidad del autostop, conviene mencionar las desventajas asociadas a este medio de transporte.
En particular, si tiene una cita importante a la que no quiere faltar, o si su destino está fuera de las rutas habituales, planifique su viaje con antelación o no dude en utilizar los servicios de autobús (que funcionan en la isla pero son perfectamente funcionales).
Por último, si su viaje tiene lugar después de la puesta de sol, el autoestopista no puede recomendarle lo suficiente que utilice los servicios de taxi. Son numerosos, reactivos y multilingües (espero meterme en el bolsillo a nuestros amigos del gremio del taxi 😉 ).

Una última advertencia:
Algunos de nuestros conciudadanos con vehículo se olvidan de decirte al subir que tienes que pagar una tarifa. ¡Cuidado con la sorpresa al llegar!

Yo, el autoestopista en SXM, no te animo a que te pongas en peligro de ninguna manera. Cada mes, en tu revista CoconutKronicle, descubrirás mis aventuras en la carretera. Si os apetece, ¡os invito, lectores, a compartir vuestras experiencias por la carretera de SXM con la comunidad de San Martín!



Hasta pronto para nuevas aventuras en la Crónica del Autoestopista...